viernes, 8 de agosto de 2008

Vietnam (2): Saigon (Ho Chi Minh City)

Saigon es la capital de lo que en su dia fuera Vietnam del Sur. Epicentro de la guerra de Vietnam, hoy en dia es más conocida como Ho Chi Minh City. Siendo bastante más extensa que su homóloga del norte (Hanoi), Saigon da cama a casi diez millones de almas. Aún así, la ciudad no es tan caótica como podríamos haber esperado y en cambio es, en cuanto a Vietnam se refiere, lo más parecido que hemos visto a una ciudad occidental. Cadenas de hoteles de lujo americanas, Kentucky Fried Chickens y unos precios bastante occidentalizados se dejan ver por toda la cuidad.

Precisamente porque los precios en Saigon no son los del resto de Vietnam, nos vimos obligados a alojarnos en un hotel (se hacen llamar hoteles pero que nadie se imagine un hotel sino un hostal de los malos) un tanto tenebroso. Al ser ahora cinco personas, solemos dividirnos en una habitación doble y una triple, ya que no es fácil encontrar habitaciones en las que podamos dormir los cinco juntos. Total, que por temas logísticos, los mendas se cogieron una habitación doble en el mencionado hotelucho mientras que Pablo, Jacobo y Javi cogieron una triple en el de al lado.

Y primera noche, primer incidente. Estos hoteles de gama baja (baja baja) suelen tener, en lugar de wifi (bastante extendido en cualquier hostal mediodecente), un ordenador en la recepción para uso de los huéspedes, normalmente gratuito. Durante la mañana después de la primera noche nos conectamos (básicmante para ver si Rafa Nadal ya había desbancado a Federer como nº1...), y al acabar de usar el ordenador el recepcionista nos dice que hay que pagar por el uso del ordenador. Nos liamos en una discusión porque el tipo no nos habia avisado de que internet era de pago, y que si tal y que cuál. El tio, más chulo que un ocho, nos dice que si no pagamos (estamos hablando de la miseria de veinte céntimos de dolar) nos echa. Y como para chulos nosotros, le decimos que nos vamos encantados, no por no pagar veinte céntimos, obviamente, sino porque el tio se habia pasado tres pueblos de vacilón.

Vuelta a hacerse las maletas y nos disponemos a dejar el hotel. Hasta aquí bien. Pero toma sorpresa cuando bajamos a la recepción y el amigo recepcionista se planta (junto con un amiguete suyo con cara de matón al que suponemos llamó para la ocasión) para que le paguemos por la única noche que habíamos pasado en su hotel. Nosotros, que nos pareció escandaloso que nos echaran de un hotel y que encima nos reclamasen los doce dólares que cuesta una noche de estancia, le digimos claramente que no pagábamos ni por asomo. Tan tranquilos, nos dirijimos hacia la puerta, mochilas a la espalda. Y empieza el espectáculo. Un tercer hombre (presumiblemente el padre del recepcionista, por edad y porque era igual de feo) cierra la verja del hotel y se pone en medio para impedirnos el paso. Buenamente, le decimos que no se ponga tonto y que nos abra, porque por mucho que nos cerrase el paso no teníamos la más mínima intención de pagar ni un centimo. Pues va el tio, coge una banqueta, y la levanta en plan amenzante. Así que la cosa se pone seria. Intentamos abrir las puertas pero con las mochilas a cuestas y el tio de la banqueta amenzando y al borde del infarto (estaba mucho más asustado que nosotros) no lo conseguimos. Empiezan las amenzas con puños, insultos en vietnamita, insultos en ingles, insultos en castellano e insultos casi hasta en hebreo, y justo en ese momento aparecen Javi, Jacobo y Pablo al otro lado de la verja (venáin de su hotel) y entre los cinco conseguimos abrirla, y "escapamos" entre insultos de un lado y el otro.

(Nota para las madres: aunque la escena parece más bien dramática no tiene menos de cómica, sobretodo si se tiene en cuenta que el tipo de la banqueta no pasaba del 1.50m y los 45kg, menos que nuestras mochilas, y que la banqueta, una vez levantada por el personaje este, nos llegaba al pecho a duras penas. Así que, mamás, no sufráis. Es que, si no dramatizamos un poquito, la historia se nos queda en nada...)

Rifirafes aparte, los vietnamitas son gente bastante amigable y amable, sobretodo si uno ha pasado por Rusia antes que por Vietnam. De hecho, este tipo ha sido de la poca gente desagradable que hemos encontrado en todo el viaje (otra vez, Rusia juega en otra liga, y no cuenta para esta última frase).

El caso es que, mochilas a la espalda, chorro de adrenalina en sangre y cuatro ojos por cabeza por si acaso, hubo que buscar otro hotel. Y no por chulería, sino por falta de oferta, nos cogimos una habitación en el hotel de al lado. La habitación nos la dieron doble aunque deberían habernos dado un triple porque la cucaracha que venía de regalo (ver foto) ya ocupaba una cama ella solita.
La ciudad es muy pero que muy grande y por eso lo mejor es moverse en moto. Y así lo hicimos. Alquilamos un par de motos (Pablo se quedo en su hotel medio enfermo) y nos adentramos en el Vietnam más rural en busca de un pueblo llamado Cu Chi, en el que están abiertos al público (pagant, San Pere canta) los túneles donde los vietnamitas se escondieron durante la famosa guerra de Vietnam. Los túneles son impresionantes por lo pequeños que son y por su extensión. Hay más de 200km de túneles en los que los vietnamitas comían, dormían, se entrenaban e incluso se operaban. Mirar las fotos porque es increíble que estos tios pudieran vivir durante semanas en unos túneles que no pasan de 90x70cm y que están llenos de murciélagos. El más largo que cruzamos media 30 metros (que no es nada) y la sensación de claustrofobia era horrible.

Cu Chi está a unos 100 km de Saigon y el viaje en moto no tuvo desperdicio. Salir de Saigón fué toda una proeza teniendo en cuenta que un servidor (Prada) nunca había llevado una moto con marchas y que compartir calzada con veinte motos por metro cuadrado nos es algo que uno haga todos los días. Si a eso le unimos la lluvia de rigor, la hazaña toma aires épicos. La entrada fué algo más complicada porque las lluvias colapsan la ciudad por completo. No sabemos quién diseñó la ciudad pero hacer calles que hacen subida tras una bajada no es lo más eficiente en cuanto a evacuación de aguas. Balsas enormes de agua se acumulan en las calles y crean un caos circulatorio absoluto. Nosotros, que después de casi 200km en una jungla de motos bajo la lluvia, nos creíamos que unos simples charquitos no podrían acabar con nosotros. Así que, cogiendo carrerilla y dándole bien al gas, nos dispusimos a atravesar la primera gran balsa de agua con la que nos encontramos. Diez metros y seguimos en pié. Veinte metros y seguimos en pié pero aminorando. Treinta metros y seguimos en pié pero lentos como una tortuga y con los piés en alto porque el agua cubre media rueda. Cuarenta metros y el motor nos pide a gritos (y con señales de humo) que paremos. Cincuenta metros y hay que apoyar un pié en el agua...en mala hora nos pusimos bambas y calcetines. Al final la moto casi fallece, aunque tras casi una hora de ejercicios de reanimación conseguimos que viviera...toda una experiencia.

Desde Saigon dimos el salto a Camboya, donde llevamos ya casi una semana. Pero como por motivos logísticos (a saber, que internet en Camboya es un lujo) no hemos podido colgar la crónica de Saigón hasta hoy, la de Camboya la colgaremos un poquito más adelante.

La conexión a internet no nos da para colgar fotos así que colgaremos todas las fotos de Vietnam en cuanto podamos.

Un abrazo a todos los que nos sigan leyendo.

Barbe y Prada

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque los contrincantes sean del peso pluma, con gente extraña - vietnamitas,camboyanos,tailandeses,etc. -no hay que jugarse un porrazo, un navajazo, o algo peor, y menos aún por unos centimos de dolar. Ni "Por un puñado de dólares". El ego o la chulada mejor dejarla para mejores ocasiones. Por ejemplo, con Cinto, Batlle, Calvillo o Miguel, que sabeis que son buenas personas y no van a reaccionar con violencia física, sino verbal a lo sumo.

Actuar con inteligencia y astucia. ¡Hay que sobrevivir¡

Unknown dijo...

Hola chicos vaya esperiencia la vuestra en Vietnam , yo estoy ahora aqui y por suerte mas o menos todo ha ido bien... ahora tenemos el problema que casi nos ha pillado la inundacion de Sapa, stamos tiradas en Hanoi a la espera de noticias para ver si podemos coger el tren esta noche como teniamos previsto o seguimos tiradas aqui en el norte, la verdad k es un caos.

Suerte y seguir contado vuestras aventuras que son mejor k la tele !!!!

Un abrazo.

Yolanda (masnou)

Anónimo dijo...

Buenas! Como os va todo?? Ya veo que os encontrasteis al velat! q gracia no? Yo la semana q viene empiezo mi andadura por EEUU y cursar el master en Chicago. Si os pasais por EEUU encantado de recibiros!! Pasaroslo muy bien!

P.D: de Prada pekeño te exa de menos Guille de Prada mediano. jeje

Cristian ALGAR

Anónimo dijo...

hola chicos! ya veo que aun teneis fuerzas para chulearos...pensad que aunque sean pequeños no siempre se dejan y uno se multiplica en 20. valorar y actuar en proporcion.
leo que la lluvia os persigue...hasta cuando? la verdad es que no os imagino en los tuneles porque vuestras medidas no son la estanderes del pais.

esperamos con ganas las fotos del lugar y vuestra aventura en motos, que miedo me dais!

Seguid disfrutando y un besazo

Nati Jordi Víctor Àlex

Unknown dijo...

que grande esa pelea al estilo guerra de vietnam!!

Como dice "Guillermo Padre" yo no me la jugaria contra los expertos en karate que andan sueltos por asia...

Cuando volváis ya montaremos una buena tangana de pressing catch, ok?


cinto

Unknown dijo...

Hola chicos, como van? que bueno que tienen compañia por 5 meses! ahora si que tengo envidia de la buena aunque después de oir lo de la cucaracha creo que el plan mochilero no es lo mio. Les cuento que hemos recibido la postal que nos mandaron de vietnam, que ilusion nos hizo recibirla, era como tenerlos un poco más cerca! :)

les mando un beso muy grande!
Michelle

Miguel dijo...

Me parto con vuestra huida!!! Jjajaaajajajajaj... Coincido al 100% con Guillermo padre: en cuanto llegueis os parto la cara con sumo gusto! JAjajajajajaja!!! ;)

En cuanto a la moto, con lo unico q debeis tener cuidado es q no se meta agua por la entrada de aire de la moto (q suele estar debajo del sillin en la moto q debiais llevar vosotros): por eso algunos 4x4 llevan esos snorkles que llegan hasta el techo. Por lo demas, podeis meter la moto por el agua el rato q querais!

No decis nada de la gastronomia, salvo por el KFC!

Gracias por la postal!!!

Un abrazo!